Tres miembros de un pequeño grupo terrorista atracan un banco para solventar los apuros económicos de un colegio infantil. Christa es la única que consigue huir de la policía, pero es perseguida tanto por el atraco como por su condición de terrorista. Pero lo peor es que el colegio no acepta el dinero que les ofrece y sus correligionarios no parecen dispuestos a ayudarla. Inesperadamente, encuentra comprensión y refugio en una joven que tomaron como rehén durante el atraco.