Para no perder su hogar, Raya, de 17 años, y su hermano pequeño, ocultan la muerte de su abuela. Raya trata todos los trucos posibles para hacer parecer que está viva, mientras al mismo tiempo se permite alimentar sus sentimientos hacia su profesor de inglés. Pero a pesar de todos los esfuerzos realizados, la situación se va de sus manos. Raya espera la ayuda de su madre en la lejana Londres.