Diana se ha enamorado de Mayte (Lorena Berdún), una sexóloga. Cuando se acuestan, Diana tiene la sensación de que Mayte no lo ha disfrutado tanto como ella y empieza a darle vueltas a la cabeza temiendo que ella nunca pueda estar a su altura en la cama. Le pide consejo a Aída y ésta le dice que debe hacer todo lo posible por averiguar qué es lo que más hace disfrutar en la cama a su pareja y así poder retenerla más tiempo a su lado. Diana le hace caso, pero no todo le sale como ella quiere. Por otra parte, la economía en casa de Gonzalo no pasa por buenos momentos: van a embargarle el bar y no sabe qué hacer para evitarlo. Decide contarle el problema a su mujer pero antes de abrir la boca ella le dice que no se encuentra muy bien últimamente y que tiene la presión arterial por las nubes. Preocupado por lo que acaba de escuchar, Gonzalo no le cuenta nada a Carlota para evitarle el disgusto y comienza a buscar un trabajo que compaginar con la gestión del bar. Se hace vendedor de cosmética y empieza a perseguir a sus amigos para colocarles productos del catálogo de belleza, pero al final Carlota termina por enterarse.